La industria del petróleo y gas, y en especial las empresas agremiadas en la ACP, entiende y comparte el objetivo del Gobierno Nacional, de reducir significativamente la pobreza y la inequidad social y de contribuir a la gestión del cambio climático, en el marco de una transición integral energética, macroeconómica y productiva.
En este sentido, la Asociación comparte la necesidad de una reforma tributaria para continuar con el ajuste fiscal y buscar recursos para programas estratégicos del Gobierno y está de acuerdo en realizar un esfuerzo tributario, en especial en época de precios altos y, de ser posible, destinado a programas de lucha contra el hambre, la protección ambiental y la paz territorial.
Este esfuerzo debe considerar, como punto de partida, que la actual carga tributaria que aplica al sector, ya de por sí, permitirá a Colombia beneficiarse de los altos precios del petróleo registrados en la actual coyuntura energética internacional. Se estima que el ciclo de altos precios del petróleo para el año 2022 aumentará en 24 billones de pesos el aporte de las empresas del sector al Estado, es decir, el sector de hidrocarburos pasará de aportar 34 billones de pesos en el año 2021, a 58 billones de pesos en el año 2022 , incremento en recaudo que beneficiará a millones de colombianos, y casi comparable al recaudo adicional esperado por el Gobierno Nacional con la Reforma Tributaria en discusión.
En este contexto, es importante señalar que, para generar impuestos e ingresos fiscales, no de coyuntura sino a mediano y largo plazo, y en el marco de una transición integral, el sector debe ser sostenible y crecer. Y que para crecer se requiere de inversión y para recibir esa inversión el país debe ser competitivo.